1º de Marzo

Hoy es 1º de Marzo, y ya no se sobre que escribir.
¿Me estará agarrando el "viejazo"?..¿ó el olvido?
Ó solamente, quizás, sean las ganas de dormir toda una semana entera, de corrido.
Y levantarme un sábado a la tarde, poner la pava al fuego, tomar unos ricos mates y
zapar un rato.
Hoy es 1º de Marzo, y las ganas de escribir vuelven.
Y descubro estrellas dentro de tu pelo.
Y se esconden y se meten dentro de tus ojos, muy dentro.
Y las estrellas se vuelven cada vez mas hermosas y mueren, al limite de la belleza.
Ya el dia termina, ya casi, el agua ya hirbió hace rato, la zapada dejó de sonar
hace un tiempo.
Y la tinta de la lapicera se va terminando.
Vos ya te fuiste hace una eternidad, pero parece tan poco, y parece tanto.
Cambio de lapicera y sigo, como desafiando al papel.
El muy terco se dobla y se moja por el rocio de la tarde-nublada.
Igualmente, sigo. Como desafiando al papel.
Hasta que se moje. Hasta que se borre todo lo que está escrito y lo que falta por
escribir.
Hasta que me canse, ó hasta que te canses.
Ésto de escribir le da a uno la llave de la puerta que da paso a la... ¿a la qué?..
¿imaginación?.
Ah si, de eso se trata ésto.
De "Imaginar". Relatar historias que nunca pasaron, ó quizás si, quien dice que no.
¿Yo?
No, yo no tengo poder de decidir en nombre de mi mente.
Esta bien que este adentro mio, pero tiene vida propia.
Yo soy uno, y ella es otra. Y casi siempre se porta bien. Y otras veces no.
No se da respiro la muy zorra. No tiene tranquilidad.
Piensa y piensa, y carbura, escupe recuerdos y piensa de vuelta, retoma y sigue.
Y se pierde en si misma. Y se encuentra perdida. Y se mira en un espejo y se reconoce.
Y festeja, y llora, y rie. Y camina, corre y se arrastra.
Y salta y se agacha. Y vuela y aterriza. Y pide cancha y vuela de vuelta.
Y se pone los cortos, se saca la pechera y entra al verde cesped.
Y corre por los costados. Tira tacos y chilenas.
Y la pide, grita. Y se anticipa y cabecea.
Y pierde la memoria y se despierta. Y está de nuevo en un laberinto.
Y está de nuevo perdida. Y se encuentra perdida.
Y se cansa y cierra el libro, apaga el velador y nos vamos a dormir.
Uno dentro del otro. Ella en mi cabeza. Yo en su integridad.
Mi mente y yo.
Asi como "Platero y Yo", pero con mi mente en lugar de Platero.
Platero está en el parque, regando las plantas mágicas.